Esta vez os traigo un par de fotos de naturaleza viva. Me siento especialmente orgulloso de la segunda. A ver que os parece.
Distancia focal: 35 mm.
Velocidad de obturación: 1/640s
Diafragma: F/4
Sensibilidad: ISO 100
Distancia focal: 35 mm.
Velocidad de obturación: 1/640s
Diafragma: F/4
Sensibilidad: ISO 100
Hace unos días estuve paseando por el casco antiguo de Vilafranca del Penedès y, a falta de cámara compacta, me llevé la réflex. No iba con la intención de sacar muchas fotos aunque esperaba sacar alguna buena, ya que la gente de Vilafranca se encontraba esos días practicando para las fiestas que empiezan el lunes que viene. Por el tono de la anterior frase ya podéis deducir que fotos buenas pocas. O mejor dicho, ninguna.
Para empezar, la menos mala.
No me equivoqué en lo de encontrarme a gente practicando, aunque no era lo que esperaba...
Espero acercarme durante la próxima semana, una vez empezadas las fiestas, y sacar mejores fotos de alguno de sus folklore.
Aunque ya difícilmente conseguiré batir mi récord de entradas por mes, me quedaré muy cerca de las 20 creadas en enero. Y, con toda seguridad, batiré el número de fotos publicadas y, sobre todo, la calidad de éstas.
Nunca ha sido un objetivo, pero creo que publicar entradas con regularidad (estoy intentando publicar una entrada cada dos días desde hace bastante tiempo) es una buena forma de conseguir fidelizar a los visitantes.
Así que todo y la puerta de la foto, aquí NO cerramos por vacaciones.
Distancia focal: 35 mm.
Velocidad de obturación: 1/125s
Diafragma: F/1.8
Sensibilidad: ISO 100
Los que me conocéis ya sabéis que hace bastante tiempo, prácticamente desde que adquirí la Reflex hace unos 8 meses, que voy dándole vueltas a la posibilidad de comprar una impresora fotográfica con la que sacar impresos, in situ, de mis fotos favoritas. El objetivo no es ahorrar dinero a la hora de sacar copias de las fotos, sino poderlas imprimir uno mismo con la satisfacción que produce el poder cubrir todo el flujo fotográfico uno mismo, sin tener que contar con la ayuda de terceros.
En un principio quería una pequeña impresora doméstica con la que imprimir fotos con un tamaño máximo de A4. Las hay buenas por unos 150 euros. Sin embargo, una comparativa de impresoras de gran formato aparecida en la revista Digital Camera del mes de agosto me hizo cambiar de idea. Con esas impresoras puedes sacar fotos en tamaño A3+ (33x48 cm), un tamaño más que considerable con el que podemos plantearnos imprimirlo prácticamente todo nosotros mismos. Las impresoras de la comparativa iban desde los 399 euros de la Stylus Photo 1400 a los 1.646 euros de la Epson Stylus Pro 3880. Como no quería gastarme mucho y las pruebas de impresión de la 1400 que parecían en la revista me parecieron más que aceptables, acabé decidiéndome por ella. Uno de los inconvenientes de la impresora es que sus cartuchos son los mismos que los utilizados por alguna impresora A4, y por lo tanto, de una capacidad quizás demasiado limitada para impresiones en A3+. A mi, personalmente, me parece más una ventaja que un inconveniente, ya que hace que el desembolso por adquirir nuevos cartuchos no sea tan elevado, aunque tengas que hacerlo más a menudo.
El coste de impresión de una foto en A3+ con esta impresora (tinta y papel) es de 4,28 euros. Un coste bastante bajo que nos ayuda a romper con la extendida creencia que imprimir las fotos en casa es una ruina. Aunque ya he comentado antes que mi objetivo no es ahorrarme dinero en cada copia.
La impresora en cuestión es la siguiente y podéis verla ya perfectamente ubicada.
Como se puede apreciar en la foto, es un armatoste considerable, pero me ha acabado cabiendo en el escritorio, aunque no en el sitio que tenía pensado para ella. En la siguiente foto la impresora de cerca.
Estéticamente, sin ser fea, no es una obra maestra del diseño. Aun así, no desentona. Lo que sí desentona es el cable USB que he aprovechado de mi antigua impresora…
Y a lo lejos el sitio que debería haber ocupado, reemplazando a mi antigua impresora de formato A4. En ese sitio he tenido que colocar el imprescindible juego de escritorio del IKEA.
Como no quería imprimir las fotos para guardarlas en un álbum, me pasé por el IKEA en busca de varios marcos de la colección Ribba. La intención no es imprimir varias fotos, ponerlas en sus marcos, y no cambiarlas en la vida, sino más bien lo contrario. Ir cambiándolas de forma más o menos regular. Por eso también compré un par de estanterías especiales para cuadros, también de la colección Ribba. De esta forma no sólo podemos cambiar la foto del marco sino la ubicación y orientación del mismo dentro de la estantería. Pero mejor lo vemos a través de unas fotos.
Empezamos con mi primera foto impresa (10x15 cm) y debidamente enmarcada.
Como se puede apreciar, la calidad de la impresora es bastante buena y los colores respetan bastante los originales, todo y estar la foto revelada con el método cruzado. Las fotos en blanco y negro también me parecen bastante aceptables.
Y vamos por último a la tercera y última foto impresa, por el momento.
Ésta foto está impresa en una hoja A3+, aunque no ocupa todo el área disponible para adaptarse al marco.
La estantería de la que os hablaba antes es la que podéis ver en la siguiente foto.
Pero veamos como queda con los cuadros, los de 10x15 cm, ya colocados.
Y ya por último, una foto en la que podéis apreciar la diferencia de tamaños entre los dos tipos de marcos. El grande está en el suelo, ya que tengo que hacer un “apaño” para ponerlo con seguridad en la estantería (supera los 50 cm máximos permitidos por la estantería).
He comprado otros dos tipos de marco, pero aun no he imprimido nada. Cuando los tenga todos colocados os enseño el resultado final.
Si queréis que os de más información sobre la impresora o los marcos, no dudéis en hacérmelo saber.
Después de enseñaros Sant Julià de Vilatorta, el Hotel / Mansión Torre Martí y Sant Llorenç del Munt llega el turno del Pantà de Sau. Ese famoso embalse fue inaugurado en 1962 y cubrió el pueblo de Sant Romà de Sau. Cuando el nivel del agua embalsada es bajo, no es el caso, hasta puede verse parte del pueblo; especialmente el campanario. También he leído que en épocas de sequía prolongadas el pueblo queda totalmente al descubierto, pudiéndose visitar íntegramente.
Yo nunca había estado y, sinceramente, me esperaba algo más. Quizás lo tenía demasiado idealizado por esas imágenes que he visto tantas veces en El Temps de TV3.
Actualmente el embalse se encuentra rozando el máximo de su capacidad, a los ojos de un inexperto…
Junto al pantano podemos ver varias partes de la maquinaria original, ya reemplazada por tecnología más actual.
Pero lo mejor no fue el embalse sino la oportunidad que nos dio de dirigirnos a Rupit por una especie de pista forestal, mal asfaltada pero asfaltada al fin y al cabo, de un sólo carril. No son muchos kilómetros, pero al tener que hacerlos a unos 30 km/h el recorrido se hace bastante largo. La alternativa es dar la vuelta y acceder a Rupit por arriba, a través de una carretera nacional, pero entonces nos perdemos vistas como ésta:
En la última entrada de esta larga serie visitaremos Rupit. Un pueblo que me sorprendió muy gratamente.
¡Os espero!
Sino la comparamos con la muralla de Carcassonne, está hasta bien…
Distancia focal: 35 mm.
Velocidad de obturación: 1/160s
Diafragma: F/9
Sensibilidad: ISO 100
Los que conocéis el blog desde sus inicios ya os habréis dado cuenta que no soy muy amigo de los retratos. En realidad no es que no lo sea, sino que cuando voy a un sitio que no conozco huyo de fotografiar la estatua, el edificio, el paisaje, … junto al plano completo que demuestre que hemos estado ahí. ¿El objetivo, aunque parezca contradictorio? Conseguir fotos más personales. Creo que es bueno intentarlo, aunque no siempre se consiga. Por cierto, no hay nada peor que pensar que acabas de fotografiar algo desde un encuadre distinto y ver cinco minutos a otro turista que toma otra foto prácticamente desde el mismo sitio…
Sin embargo, hay veces, en que un escenario, una luz, una persona, en definitiva, una situación; nos obliga a sacar retratos. Ya sean de plano completo, de tres cuartos, de plano medio... En el caso concreto de esta entrada la situación se dio en el Monasterio de Poblet y tal como las hacía tenía muy claro que las revelaría en blanco y negro y con muy alto contraste.
Melancolía
Alegría
Tristeza
Satisfacción
A continuación un ejemplo del poder de la naturaleza. La foto es de un árbol ubicado en la Plaza Mayor de Montblanc, capital de la comarca de la Conca de Barberà (Tarragona).
Distancia focal: 35 mm.
Velocidad de obturación: 1/320s
Diafragma: F/1.8
Sensibilidad: ISO 100
En anteriores entradas…
“…he estado en Sant Julià de Vilatorta, en la comarca de Osona. El pueblo se encuentra entre la Plana de Vic i las Guillerías y el culpable de que fuéramos a parar ahí fue LetsBonus en primera instancia y el Hotel Torre Martí en segunda…”
(Leer la entrada completa pulsando aquí)
“… ya anticipaba que, próximamente, traería fotos de este pueblo… A pocos metros del Hotel se encontraba este impresionante Colegio del Roser…”
(Leer la entrada completa pulsando aquí)
Esta vez toca publicar las fotos del Sant Llorenç del Munt, un macizo situado entre las comarcas del Vallés Occidental y el Bages. En una de sus cumbres, la Mola (1.104 metros), se encuentra el Monasterio de Sant Llorenç del Munt. El monasterio es de origen románico y fue construido entre el siglo X y el siglo XI. La excursión a pié por un sendero de Gran Recorrido, desde Sant Julià de Vilatorta es muy recomendable. No son muchos kilómetros y el entorno es bastante espectacular. Nosotros tardamos unas 3 horas contando la ida y la vuelta. Eso sí, parando varias ocasiones para hacer fotos.
Iniciamos la excursión tomando la GR-2. Como nos habían avanzado, el camino empieza con una ascensión muy ligera, aunque luego se van haciendo cada vez más pronunciada, sin llegar a ser complicada.
También al inicio podemos encontrar alguna propiedad privada.
Pero a medida que vamos avanzando por el sendero nos vamos apartando más y más de la civilización, aunque un letrero nos recuerda que hoy día los bosques también son “privados”…
Como comentaba anteriormente, las vistas son bastante espectaculares al llegar al monasterio. Lástima que entonces el sol ya estaba muy arriba y no favorecía demasiado.
Y a la izquierda, el monasterio.
Y acabamos con la foto de una de las entradas.
Continuará…
Antes de continuar con las fotos de la comarca de Osona os traigo estas tres fotos de una fuente, o mejor dicho, fuentes; en Espluga de Francolí.
Normalmente, aunque realice varios encuadres para una misma foto, suelo quedarme sólo con una. Sin embargo, aquí no he sabido elegir…
Distancia focal: 35 mm.
Velocidad de obturación: 1/160s
Diafragma: F/1.8
Sensibilidad: ISO 100
Distancia focal: 35 mm.
Velocidad de obturación: 1/160s
Diafragma: F/1.8
Sensibilidad: ISO 100
Distancia focal: 35 mm.
Velocidad de obturación: 1/320s
Diafragma: F/1.8
Sensibilidad: ISO 100
Con el objetivo de mejorar el aspecto visual del blog, a la vez que lo hacemos más personal, cambiamos la cabecera de éste. El mismo título y la misma descripción, pero ahora sobre una foto, o parte de ella, que publiqué el 6 de junio en la entrada Mini sesión vintage. Son tres los motivos que me han llevado a escogerla como cabecera. Por un lado la acogida que tuvo en su momento. Por otro, porque visualmente no desentona con la imagen de fondo del blog. Y ya por último porque, de alguna forma, revela dos de las características que están cogiendo mis tomas en los últimos tiempos: los bokeh y los blanco y negro. Quien sabe si con el tiempo se convierten en mis señas de identidad… Aunque faltaría una tercera característica que cada vez me gusta más, aunque casi siempre incomprendida, los encuadres difíciles.
El viernes pasado publicaba un entrada en la que os mostraba las bonitas fotos sacadas en el Hotel Torre Martí, en Sant Julià de Vilatorta.Ya anticipaba que, próximamente, traería fotos de este pueblo, de Sant Llorenç del Munt, del Pantà de Sau i de Rupit. Pues bien, aquí traigo las primeras. Esta vez no son muchas, sólo cinco, y es que había demasiadas cosas a hacer en demasiado poco tiempo.
A pocos metros del Hotel se encontraba este impresionante Colegio del Roser, de principios del siglo XX, de estilo modernista.
Sitio perfecto para escoger que ruta o rutas GR (sendero de Gran Recorrido) íbamos a realizar a pié.
Pero antes tocaba dar una vuelta a pié por el pueblo. El pueblo tiene unos 3.000 habitantes y me sorprendió muy gratamente lo cuidado que está todo. Las casas tienen un encanto especial y tanto viejas como nuevas siguen los mismos patrones, haciendo que el pueblo no pierda encanto con el paso del tiempo. Además de las casas “típicas” se pueden ver algunas distintas que llaman poderosamente la atención. Como esta, justo enfrente del Colegio del Roser.
O esta otra, a la otra punta del pueblo. Lo sé, siempre buscando encuadres difíciles…
Y ya para acabar, una típica de zonas rurales como esta. Pues no les gustaba ni nada posar a las vacas…
Espero os gusten.
Hace bastante tiempo que veo molinos como el de la foto por todas partes, por lo menos aquí en la provincia de Tarragona. Siempre decía de fotografiar alguno, pero nunca lo hacía. En parte porque suelen estar en sitios poco accesibles y al no tener teleobjetivo no conseguiría un encuadre interesante. El otro día, en pleno Montblanc, vi éste y no pude dejar escapar la oportunidad. Esta foto en concreto no es gran cosa, pero creo que se pueden conseguir fotos muy bonitas con estos molinos integrados en el paisaje.
Por cierto. Aprovechando la creación de esta entrada he buscado por Internet y he visto que es una empresa situada en Montblanc, precisamente, quien fabrica estos molinos de viento que, según pone en la Web, utilizan la fuerza eólica para bombear agua. ¡Así que mis dudas han sido resueltas!
Distancia focal: 35 mm.
Velocidad de obturación: 1/400s
Diafragma: F/9
Sensibilidad: ISO 100
El 2 de febrero publicaba una entrada en la que explicaba que, a partir de aquel día, ya estaba dado de alta en flickr y que las fotos que fuera colgando en el blog estarían ya enlazadas a flickr en lugar de a myPicturetown. Pues bien, después de medio año, me he decidido colgar en mi cuenta flickr también las fotos anteriores a ese 2 de febrero. Es decir, a partir de ya, las fotos de las entradas antiguas también enlazan con mi cuenta flickr.
He aprovechado también para agrandar algunas de las fotos verticales así como para eliminar imágenes smileys que habían dejado de verse y que, a parte, en la versión para móvil provocaban problemas (si aparecería antes que la primera foto, la web lo mostraba como si fuera la primera foto de la entrada).
Por cierto, haciendo esa revisión también me he dado cuenta que algunas entradas antiguas no mostraban algunas fotos alojadas en myPicturetown. Desconozco el problema pero, en cualquier caso, ahora que están alojadas en flickr se visualizan correctamente.
Ha sido un trabajo bastante tedioso, pero sin lugar a dudas a merecido la pena. Los que habéis conocido el blog recientemente lo agradeceréis al ir consultando entradas antiguas. Y a los que aun no habéis empezado a consultarlas, os insto a ello.
Esta semana he estado en Sant Julià de Vilatorta, en la comarca de Osona. El pueblo se encuentra entre la Plana de Vic i las Guillerías y el culpable de que fuéramos a parar ahí fue LetsBonus en primera instancia y el Hotel Torre Martí en segunda. El Hotel es en realidad una encantadora casa señorial construida en el año 1945 por el arquitecto Riera Clariana. En ella, pintura, escultura, música y literatura se unen a la hostelería. La familia Morral transformó esta mansión de estilo Riviera Francesa en un hotel íntimo y acogedor.
Este Hotel es, sin lugar a dudas, el más agradable en el que he estado hasta el momento. No sólo por el acogedor ambiente que transmiten sus paredes, su decoración y sus “trozos” de arte, sino también por el exquisito ambiente que transmite la familia Morral. Realmente te hacen sentir como en casa. Si es que podemos comparar mi humilde pisito con esta mansión…
Mención especial al restaurante del hotel, en el cuál cenamos un menú degustación compuesto de (no traduciré el nombre de los platos por el bien de la lengua):
La bebida tampoco tenía desperdicios:
Todos los platos fueron sensacionales, aunque los que más me gustaron fueron los dos primeros. Tanto el atún como la crema de escalivada estaban espectaculares.
Pero bueno, ya no os pongo más los dientes largos y vamos a por las fotos. Como siempre, o casi siempre, he intentado huir de las fotos de reportaje para hacer algo más personal y minimalista.
Empezamos con el salón donde cenamos. Como podréis ver, las antigüedades lo inundaban todo.
A continuación las sillas del restaurante. ¿Raras? Son las antiguas sillas de un cine que fueron arrancadas, restauradas y adaptadas para su nuevo uso.
Aquí una vista general del salón, y de sus ventiladores, aunque un tanto especial…
Continuamos con las antigüedades.
Otro ventilador, aunque en este caso de las escaleras. No hace falta decir que el Hotel también disponía de aire acondicionado.
En la planta de arriba, donde se encontraba nuestra habitación, nos encontramos este bonito teléfono. El post-procesado de la foto era obligado…
… y la interpretación también…
¡Hasta las manivelas de las puertas eran bonitas!
Uno de los sitios más acogedores del Hotel era la biblioteca. En ella tenían un puñado de libros antiguos y periódicos, los cuales podían ser consultados. No podía faltar una máquina de escribir antigua.
¿No os parece acogedora? Y sí. Es el vino de la cena. Decidimos empezarlo un poquitín antes…
Y aunque no es una foto que me guste especialmente, no puedo irme sin enseñaros antes una foto del exterior, aunque podéis ver muchas más y mejores en la propia web del Hotel.
¡Se me olvidaba! Una foto del jardín en la que salgo un tanto afeminado…
Próximamente publicaré nuevas entradas con las fotos del pueblo, Sant Julià de Vilatorta, Sant Llorenç del Munt, el Pantà de Sau i Rupit.
