martes, 3 de mayo de 2011

Mi nuevo objetivo

Después de casi 5 meses desde la compra de la Nikon D3100, llegó el momento de ampliar el equipo fotográfico, el cual, hasta ahora, estaba formado por:

  • La susodicha.
  • El objetivo AF-S DX Nikkor 18-55mm 1:3.5-5.6 G.
  • El filtro UV para proteger el objetivo.
  • Y un trípode sencillito.

Hay que decir que todo, a excepción del filtro UV, venía con la cámara, al igual que una mochila Nikon donde guardar todo el material.

Pues bien. Hace tiempo venía dándole vueltas a la compra de un objetivo. En un principio había pensado en comprar un teleobjetivo con el que poder hacer fotos de naturaleza, un 55-200mm, por ejemplo. Con él, y tirando de “zoom”, podría también reducir la profundidad de campo y conseguir bokeh mejores que los que consigo con el objetivo de “serie”. A medida que ha ido pasando el tiempo, y en parte debido a la influencia de dreamflow, he ido perdiendo el interés por un teleobjetivo a favor de un objetivo luminoso con el que hacer bokeh más espectaculares.

Después de ese cambio de decisión tenía más o menos claro que el objetivo debía tener una apertura máxima de diafragma que estuviera entre el 1.4 y el 1.8, pero no tenía mucha idea de la distancia focal que necesitaba, aunque si sabía que debía ser fija; ya que al parecer, ofrecen una calidad mayor al prescindir de varias lentes. Al no ser la D3100 una cámara fullframe  (fotograma completo), para saber la distancia focal real de un objetivo se ha de multiplicar ésta por su factor de conversión. En el caso de la D3100 por 1.5. Así, un objetivo de 35mm equivale a uno de 50mm tradicional, mientras que el de 50mm equivale a uno de 75mm, demasiado para callejear. Así que después de dejarme aconsejar, la decisión estaba bastante clara:

AF-S DX Nikkor 35mm 1.8 G.

En este enlace podéis leerlo “todo” sobre ese objetivo, así como ver fotos realizadas con él por los foreros de Nikonistas.

 

Después de hacer cuatro pruebas por Calafell, para habituarme un poco a él, tocaba una larga sesión fotográfica en la semana Mediaval de Montblanc. Pero como más vale una imagen que mil palabras, os dejo un adelanto de la entrada que publicaré próximamente.

Distancia focal: 35 mm.
Velocidad de obturación: 1/4000s
Diafragma: F/2.2
Sensibilidad: ISO 100

Ahora sólo queda probarlo en condiciones precarias de luz, donde he leído que saca muy buenas fotos.

2 comentarios:

  1. ¡¡Esto ya es otra cosa!! :D

    Una señora cerdo-fotaza. Que buenos tiempos te hará pasar este cristalito... Esperando me hallo a la siguiente entrada para ver que puedes hacer con esta lente.

    ¡Felicidades y disfrútala!

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  2. La foto, algo tétrica, no está del todo mal, verdad?

    Sí que me hará pasar buenos ratos sí...

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